Adultos

La psicoterapia para adultos, un camino para recuperar tu bienestar

Acompaño a mis pacientes a conocerse mejor y a ser cada vez más libres de las ataduras del pasado.

Cuando un adulto acude a mi consulta generalmente, tiene una teoría sobre lo que le pasa. El terapeuta, no conoce de antemano lo que le ocurre, ni lo que le conviene, por eso necesita escuchar lo que el paciente tenga que decir.

Para mi cada historia es única. Ni siquiera dos hermanos que comparten familia y vida, van a vivirla de la misma manera, ni van a tener la misma relación con su padre y con su madre, porque las subjetividades y los sentimientos van a ser distintos.

La relación que se establece con el terapeuta, también va a ser importante. Gracias a su apoyo, compañía y trabajo de elaboración, la persona afligida sabe que no está sola.

Cuando se recuerda o descubre algo doloroso, al paciente le alivia saber que allí estará el terapeuta, para acompañarlo en lo más incomprensible de su historia y que podrá volver a la sesión siguiente para entenderlo, pensar lo que ha pasado, hacerlo suyo y poder perdonar (se) y seguir adelante. La forma en que el paciente se comporte con el terapeuta, también me dará una pista, de cómo funciona en el mundo real y con las demás personas.